El tiempo ha puesto muchas veces remedio a aquello que no ha podido ponérselo la razón.
En ocasiones, solo el tiempo nos da las respuestas que tanto buscamos. Solo con su paso puede que lleguemos a entender lo que está fuera de nuestro razonamiento.
La ansiedad nos puede atormentar. Puede que nos ocupe la mente el querer dejar atrás lo que ya no está, o el intentar llegar con prisa a donde soñamos encontrarnos. Debemos entender que, a veces, solo nos queda confiar en el tiempo.