Después de escuchar la primera «propuesta» de gobierno de Thelma Aldana, queda más que confirmado que no hay que ser payaso para decir payasadas.
Me tomé la molestia de ver la supuesta transmisión en vivo en la que la ex fiscal presentó su primera «gran propuesta». Thelma Aldana empieza hablando de manzanas y termina hablando de peras. Lo digo porque primero presenta la problemática del sistema penitenciario y luego termina proponiendo el cierre de Pavón, sin nunca especificar en dónde reubicaría a los presos de esa cárcel, para dar paso a la construcción de un «centro de innovación» en el sitio donde actualmente está la penitenciaría.
¿De qué serviría mover presos a otros lados y trasladar a Pavón fuera de la ciudad si no se reforma y depura el sistema penitenciario? Si el sistema ya está saturado, ¿cerrar una cárcel no lo saturaría aún más?
Mientras niños guatemaltecos mueren de hambre, faltan medicamentos en los hospitales, la inversión y el empleo no crecen como deberían y la infraestructura del país se cae a pedazos, la primera gran idea del equipo de Thelma Aldana fue proponer un «complejo de ciencias y artes» en forma de quetzal.
Esta es una idea sin pies ni cabeza. Vale la pena preguntarse: ¿cómo se financiará esta megaobra? Si lo que preocupa es el arte, ¿no sería mejor primero dirigir prepuesto a los programas del Ministerio de Cultura y Deportes que ya existen y que están totalmente descuidados? Considero que hasta dirigir más presupuesto hacia el INSIVUMEH tendría más sentido (considerando que la propuesta incluye hasta un centro de vulcanología).
Lo que demuestran este tipo de ideas es una desconexión total de la realidad. Sin dudas es un proyecto dirigido a una élite económica con el suficiente tiempo para preocuparse por la astronomía y el teatro, que dirigiría valiosos recursos del Estado (ya de por sí limitados) a una idea caprichosa, sin sentido ni funcionalidad e ilusorio para un país con tantas necesidades mucho más urgentes.
Lo más lamentable, de hecho, no es dicho proyecto, es que tanta gente le crea. Ni Jimmy Morales ni Manuel Baldizón en sus sueños más remotos tuvieron la ocurrencia de hacer semejante propuesta. Pero, veo que Thelma Aldana tiene un grupo de fanáticos, cegados completamente y que pareciera la van a respaldar sin importar lo que haga, diga o proponga. Ahora, sin importar todos los señalamientos en su contra, pareciesen apoyar lo que tanto han criticado y contra lo que tanto supuestamente han luchado.
Si los Thelmalovers la apoyan creyendo de forma genuina en la lucha contra la impunidad y la corrupción, al ver que ella también es corrupta y que ahora también impune, pues debieron de ser consecuentes y retirarle su apoyo. Si siguen apoyando es solo por dos razones. Primera, no apoyaban la lucha contra la corrupción si no que la apoyaban a ella. Segundo, lo que siempre los movió fue el odio hacia los que ella persiguió y ese odio no los deja ver la realidad y los hechos.
Si queremos un país diferente, pues debemos elegir gente diferente. Incongruente sería entonces ir a votar por alguien que atacó la figura del antejuicio y hoy la defiende porque le conviene; que mintió en varias ocasiones al negar sus aspiraciones políticas; y que es prófugo de la justicia luego de haber perseguido a los que huían. Bien dicen que no hay que serlo, sino también parecerlo. Y ahora, Thelma no parece (ni es) una persona libre de todos los vicios característicos del sistema político guatemalteco.